La legisladora Elsa Inchassendague (JSRN) se refirió a los dichos del intendente de Gral. Roca: «Es una pena que una persona que aspira a gobernar nuestra provincia sea tan poco sensible a las necesidades de los rionegrinos y haga declaraciones con un grado tan alto de desconocimiento de lo que se proyectó y se trabajó, en conjunto con legisladores incluso de su propio partido». Agregó que «entre los legisladores del FPV por suerte hay gente con más sensibilidad y conciencia social que él, personas que lograron poner a los habitantes de Río Negro por delante de los intereses político-partidarios personales y familiares, y en su momento, a pesar de los intentos de esta persona por evitar que se llevara adelante el Plan Castello, decidieron acompañar este proyecto y lo votaron a favor». «El ninguneo al que somete Soria a los compañeros de su partido me hace pensar en qué tanto le pueden llegar a importar las opiniones de quienes no lo están adulando full-time», señaló.
Inchassendague se mostró preocupada por el desconocimiento de Soria sobre las obras del Plan Castello y sobre la realidad de muchos habitantes de la provincia. «Solo desde la ignorancia se puede afirmar que un proyecto que aspira a llevar el gas a los parajes de la línea sur, a incrementar el suministro de energía, a mejorar la sanidad y limpiar nuestras aguas mediante cloacas es un curro o un negocio para algunos vivos. Se nota que este señor no conoce mucho más que su despacho iluminado y calefaccionado, no tiene que salir a cortar leña para sobrevivir una semana bajo la nieve como tantos rionegrinos en el sur de la provincia». Se refirió también a la necesidad de las cloacas que contempla el Plan Castello y destacó: «Para entender la importancia de las cloacas a uno le tiene que importar la salud del ambiente y de las personas… Si no te importa ni la contaminación ni la gente, no podés ver lo que en realidad significan las cloacas, que son decisivas para la calidad de vida de la población. El que no lo entiende, obviamente no tiene ni idea de nada. Pero es cierto que no son tan lindas como las 231 viviendas invisibles de su ciudad». Agregó que «si queremos hablar de curros, podemos conversar sobre familias que por generaciones viven de la política, aportan poco y pretenden perpetuarse como sea».