
El Papa Francisco lideró un proceso de renovación en la Iglesia Católica caracterizado por una profunda transformación espiritual, pastoral y social. Su visión estuvo atravesada por una convicción firme: construir una humanidad más justa, digna e inclusiva.
Desde su elección, el 13 de marzo de 2013, en un contexto de crisis y desafíos para la Iglesia, Jorge Mario Bergoglio imprimió un estilo distinto: austero, directo y profundamente pastoral. Con acciones concretas y palabras claras, abrió las puertas de la Iglesia a todos, buscando un vínculo más humano y directo con los sectores más vulnerables de la sociedad.
Su legado se expresa, entre otras, en cuatro encíclicas de enorme relevancia: Lumen Fidei, Laudato Si’, Fratelli Tutti y Dilexit Nos. En Laudato Si’, llamó a proteger la “casa común” y denunció la desigualdad ambiental, situándose como una voz global en defensa del planeta. En Fratelli Tutti, promovió la fraternidad universal como respuesta a la fragmentación social, reafirmando que la fe puede ser puente, sanación y fuente de encuentro en un mundo herido por la división.
En este contexto de liderazgo espiritual y humano, resulta necesario destacar un hecho profundamente significativo para los rionegrinos: la canonización de Artémides Zatti en el año 2022, quien dedicó su vida al cuidado de los demás en nuestra provincia, fue también una expresión viva del mensaje central del Evangelio: compasión, humildad, sencillez, amor al prójimo.
En este marco, los Legisladores Luis Noale y Facundo López proponen que se instituya el día 21 de abril de cada año como “Día Provincial en Conmemoración del Papa Francisco”, en memoria del fallecimiento de Jorge Mario Bergoglio, primer Papa latinoamericano y argentino, por su ejemplo universal de humildad, compromiso con los más necesitados y búsqueda de la paz.