La legisladora Ana Piccinini recordó que el domingo 17 del corriente mes se cumplen dos años del asesinato del joven Diego Bonefoi, suceso acontecido en Bariloche y por el que fue condenado el integrante de la Policía de Río Negro, Cabo Colombil. Destacó la conmoción que tal acontecimiento provocó en la comunidad, ya que se manifestó en las calles con el objetivo de condenar el accionar policial que, además, derivó en una violenta represión que provocó también la muerte de otros dos jóvenes, Nicolás Carrasco y Sergio Cárdenas, presuntamente por balas policiales.
La legisladora indicó que por esos crímenes se encuentran imputados varios funcionarios policiales a quienes se sindica como posibles autores materiales de los mismos. Hizo referencia que la falta de esclarecimiento de dichos asesinatos se debe, entre otras cosas, a la falta de indagatorias de los máximos responsables de los organismos de seguridad como el ex Secretario de Seguridad, Víctor Cufré, el ex Jefe de la Policía, Comisario Villanova y el de la Tercera Región Hermosa, a quienes se les imputa la responsabilidad por la muerte de los jóvenes mencionados.
Lamentó por otra parte lo dispuesto por los integrantes de la Cámara Segunda del Crimen de Bariloche, César Eduardo Lanfranchi, Pte. Silvia Vaquero Lazcano y Héctor Leguizamon Pondal, al considerar que la postergación de las indagatorias a los mencionados integrantes de los organismos de seguridad “demora la posibilidad de esclarecer los crímenes de los jóvenes Cárdenas y Carrasco, presuntamente producidas por efectivos policiales”. Al respecto, la Legisladora Piccinini agregó que, a su juicio, «la Cámara toma un excesivo tiempo en definir el momento de las indagatorias a los imputados en esos crímenes, quienes desempeñaban altas responsabilidades en materia de seguridad al momento de los hechos, al retornar la causa al fiscal a efectos de proseguir con la investigación«.
Consideró además que las muertes de los jóvenes, Bonefoi, Cárdenas y Carrasco, el 17 de junio de 2010, son el doloroso resultado de la nefasta acción policial rionegrina, conducida en ese entonces por Cufré y Villanova, quien siguiendo el orden de la cadena de mandos dependían del entonces Ministro de Gobierno, Diego Larreguy, y el ex – Gobernador Miguel Saíz.