Hoy 21 de noviembre, queremos aprovechar para compartir algunas ideas vinculadas a esta práctica profesional. Ya no caben dudas de que esta profesión, la enfermería, es una práctica social y que su quehacer es una acción política.
También sabemos que son un recurso crítico en los servicios de salud, en nuestra Provincia y en el mundo, no solo por su número insuficiente sino también por las condiciones en las que muchas veces deben realizar su trabajo. Pero aún así debemos generar espacios de actualización, perfeccionamiento y crecimiento como disciplina en los distintos campos de la formación, el servicio, la gestión y la investigación, en aras de cumplir con la tarea indelegable que es la de CUIDAR.
Como colectivo profesional han sido protagonistas de cambios históricos, culturales y políticos en nuestra provincia, que los han provisto de marcos legales y teóricos que los ubican como una disciplina con un gran capital social de frente al futuro. En este sentido, estamos frente a un enorme desafío que es revisar nuestra historia y las trayectorias individuales que han aportado con aciertos y con errores, con lo bueno y con lo malo, a este actual escenario.
Podemos y debemos crear espacios en los que nos permitamos reflexionar acerca de nuestros orígenes, para interpretar el presente y proyectar nuestro futuro, tomando decisiones sobre cómo queremos seguir construyendo.
Por eso, los convocamos a sumarse a la tarea diaria que nos permite dar visibilidad y reconocimiento a la verdadera tarea de dicha profesión: el CUIDADO, y construir un compromiso genuino con el individuo, la familia y la comunidad.