El homenaje se realizó en el mausoleo donde descansan los restos del por aquel entonces jefe comunal, Julio Dante Salto. Allí se reunieron familiares, amigos, vecinos, compañeros de aquella gesta, el gobernador Alberto Weretilneck, los legisladores Elbi Cides, Silvana Larralde, y José Liguen y autoridades provinciales.
En primer término se entregó una plaqueta a Néstor Quiti García, último integrante con vida del Concejo de Julio Salto. Luego, Facundo Salto, nieto de Julio Dante e hijo de Rudy Salto, agradeció a los integrantes del movimiento 12 de Septiembre, quienes lograron la construcción del mausoleo. No dejó pasar la ocasión para recordar el paso de su abuelo por el club San Martín, remarcando además el trabajo realizado a través de su profesión, la medicina, la cual siempre «lo conectó con cada vecino».
«A 48 años del Cipolletazo y a 46 de la desaparición física de mi abuelo, es un orgullo que se siga recordando un hecho en el que todo un pueblo salió a la calle en defensa de su líder», relató.
Por su lado y con mucha emoción, Néstor Quiti García, hizo hincapié en la felicidad que compartieron trabajando por Cipolletti. Por último, pidió a los jóvenes que se miren en el espejo del Cipolletazo, que «es defender lo nuestro, porque por lo general siempre estamos invitados».
Tras las palabras de Facundo Salto y Néstor Quiti García, se realizó una entrega floral junto a familiares y presentes en el mausoleo de Julio Dante Salto.