Legisladoras y legisladores de Juntos Somos Río Negro piden convocar al Consejo del COIRCO para abordar la crisis hídrica del río Colorado. Además, impulsan que el organismo realice un estudio de impacto ambiental de la cuenca y se llame a una audiencia pública nacional.
Fabio Sosa, Mónica Silva, José María Apud y Carlos Johnston elevaron un proyecto de comunicación al Ministerio del Interior la necesidad de convocar al Consejo de Gobierno del Comité Interjurisdiccional del río Colorado (COIRCO).
El articulado explica el objeto de la acción: «tratar la situación de emergencia hídrica en la que se encuentra la cuenca del río Colorado, con énfasis especial en la concreción de un estudio de impacto ambiental integral de la misma, incluyendo la convocatoria de una audiencia pública nacional y, a su vez, evaluar la ampliación de facultades estatutarias del Comité en cuanto a su poder de contralor sobre obras a desarrollarse con potencial impacto en la cuenca en su conjunto».
Los legisladores explicaron que «el río Colorado presenta dos particularidades que hacen crítico su manejo, por un lado el acotado caudal (150 m3/s. promedio histórico) y por el otro, el tenor salino de sus aguas, en general de moderado a alto, e inversamente proporcional al caudal. Es decir que cuanto más bajo sea el volumen de agua del río la salinidad será crecientemente crítica».
Entre los fundamentos de la iniciativa expresaron que «a comienzos de la presente temporada primavera-estival se observó una drástica bajante del río Colorado a casi la mitad de su caudal histórico, que está teniendo fuertes consecuencias en el riego de miles de hectáreas de Río Negro y provincia de Buenos Aires».
Y recordaron que «las autoridades del Departamento Provincial de Aguas señalaron que, lamentablemente, no representaba un proceso nuevo dado que la crisis hídrica se acentuó en la última década por disminución de las precipitaciones níveas en las altas cuencas».
«Trabajos en curso de investigadores de la Universidad Nacional de Río Negro y la Universidad del Sur, en conjunto con pares de la Universidad de Bonn y del Instituto Max Plank de Alemania indican para los últimos 50 años en la Norpatagonia, una tendencia regional negativa en los índices hídricos para las altas cuencas de los ríos regionales en conjunto con una tendencia positiva y de aumento sostenido de las temperaturas en toda la región y particularmente en la zona andina, lo que agrava el cuadro descripto», indicaron. Y subrayaron: «Avanzando en la temática, la aplicación de Modelos Climáticos Globales indicaría una agudización de este cuadro de situación durante las próximas décadas».
En este contexto no puede soslayarse las implicancias que acarrea la construcción de la represa ¨Portezuelo del Viento¨ en la provincia de Mendoza, sobre el río Grande, principal afluente del río Colorado
Sosa, Silva, Apud y Johnston mencionaron que «en una reunión reciente con su par de La Pampa, celebrado en Casa de Piedra, la Gobernadora de Río Negro señaló que el aspecto más saliente del encuentro comprendió el compromiso compartido por ambas jurisdicciones provinciales por la preservación del río Colorado, así como el inicio de acciones conjuntas con las demás provincias de la cuenca para el manejo del recurso».
«La gobernadora rionegrina puso énfasis en el compromiso de ambas provincias para defender el río y la vida que genera, con especial cuidado en la situación generada a partir del bajo caudal que presenta, haciendo hincapié en la necesidad de actuar consensuadamente entre todas las provincias para su preservación, respetando los derechos hídricos del conjunto. Consideró necesario, en el corto plazo, generar acciones y un plan de emergencia y manejo ante esta realidad para seguir cumpliendo con el objetivo de asegurar el agua para consumo humano y para las actividades productivas en los valles ribereños. En dicho contexto solicitó además la necesidad de contar con estudios de impacto ambiental de la totalidad de la cuenca del río», recordaron.
En ese sentido, aseguraron que «el gobierno rionegrino ratificó las prioridades en el uso de agua del río Colorado: en primer lugar el consumo de las poblaciones ribereñas, en segundo término el riego para la producción agrícola y frutícola y luego la generación de energía y otras actividades».
«En el encuentro mencionado se acordó además solicitar al Ministerio del Interior de la Nación que convoque a las cinco provincias de la cuenca a una reunión del Consejo de Gobernadores del COIRCO para avanzar en cuestiones relacionadas con el manejo del agua a lo largo de la cuenca, con pautas de trabajo consensuadas para asegurar la preservación del recurso y cumplir las prioridades de uso previamente expuestas», rememoraron.
Los legisladores puntualizaron en que «recientes declaraciones del titular del DPA señalan que Río Negro, junto a otras provincias que integran el COIRCO, solicitaron al Ministerio de Medio Ambiente de la Nación un estudio de impacto ambiental de toda la cuenca junto con una audiencia pública nacional».
En consecuencia, concluyeron que «desde el Parlamento rionegrino entendemos necesario reafirmar este lineamiento político en la comprensión que la gravedad de la crisis hídrica planteada merece el esfuerzo de todos los actores políticos y sociales involucrados».