Se realizó en Cipolletti el acto de lanzamiento de los candidatos de Juntos Somos Río Negro, que sirvió como plataforma para que los principales dirigentes de la fuerza expusieran cuáles serán los ejes de la próxima campaña electoral. Junto a su compañera de fórmula Arabela Carreras, Alberto Weretilneck, como presidente del partido y aspirante a la gobernación, dejó planteadas algunas dicotomías: “El 7 de abril se vota entre previsibilidad o improvisación, entre diálogo o autoritarismo, entre humildad o soberbia, entre paz o violencia”.
Padro Pesatti, Vicegobernador y cabeza de lista, con la adrenalina propia de un final de discurso dejó en claro la postura de Juntos ante uno de los temas centrales de la campaña, al exclamar que “Alberto es el mejor gobernador de los últimos 40 años, por qué lo vamos a cambiar. Cómo le vamos a entregar la provincia a quien no dice una palabra de nuestra querida provincia”. Y lanzó una definición sobre Juntos: “El plan Castello es nuestro más brillante resumen, porque es desarrollo y planificación”.
A su turno, la candidata a Vicegobernadora Arabela Carreras, expresó el sentir de muchos de la concurrencia respecto a una renovación en la dirigencia de esta fuerza provincial. “Esta es la versión renovada de nosotros”, dijo en tono pausado. Comenzó saludando a sus compañeras de bancada y se mantuvo firme en su exposición, sobre todo al dejar en claro que “la transformación que iniciamos, la vemos en cada paraje y localidad, y todo con un modo distinto de hacer política, que es estar, dar la mano, dialogar, y construir soluciones en conjunto”.
Weretilneck se refirió a la forma en que se resolvió el armado de las listas de legisladores, y en este punto soltó una de las definiciones de más peso de la noche: “La diferencia entre nosotros y nuestros adversarios, es que nosotros somos buena gente. Esto queda demostrado en la generosidad de quienes cedieron sus lugares y de los que llegaron, porque no fue a los codazos ni a los empujones”.
Y completó su larga lista de contrastes con sus adversarios, al sostener que en las próximas elecciones provinciales “se elige entre el orgullo rionegrino o la vergüenza rionegrina, entre el crecimiento o la parálisis. Y eso no es poco”.
Por último, exhortó a la concurrencia: “Quiero que defendamos nuestra bandera, que es la bandera de la unidad”, y advirtió: “que no nos quieran plantar banderas pintadas en Buenos Aires y que significan división y violencia”.
Acalorados y felices se vio a los militantes al final de los discursos, que tuvieron picos de euforia, pero en la mayor parte del tiempo tuvieron casi un tono explicativo.
Carreras afrontó un tema caliente de la agenda pública, como la igualdad de las mujeres, y manifestó que “el problema de la igualdad no debe ser un debate en contra de los hombres, sino en favor de las mujeres, para cambiar la sociedad. Venimos a transformar y a abrir puertas”.
A partir de las 19 horas, se llenaron las 700 butacas, el amplio espacio del fondo y más de media cuadra de simpatizantes. En ese marco, los organizadores estimaron la concurrencia en unas 2.000 personas.
Juntos hizo una poderosa puesta en escena al ubicar sobre el escenario de 14 metros de boca y 7 metros de profundidad a los 48 candidatos, que se acomodaron por gradas instaladas en los flancos.
Delegaciones de toda la provincia arribaron para acompañar a sus candidatos a pesar de lo tórrida que fue la jornada con temperaturas que rondaron los 38 grados en el Alto Valle.